No hay de otra mis amables lectores…
Si los Leones quieren asegurar la calificación, necesitan volver a la senda del triunfo, enracharse y así poder escalar posiciones para garantizar al menos la suma de doce puntos que les darían bastantes posibilidades de hacerlo con mayor tranquilidad.
Y es el momento de empezar a conseguir las victorias, sobre todo que después de la pausa del juego de las estrellas, los melenudos reciben en su cueva a los Pericos y Guerreros, los dos cuadros más exitosos de la zona Hidalgo en lo que va de la campaña del Bicentenario.
Las fieras no han iniciado la segunda mitad como todo mundo quisiera, tienen foja de dos ganados y tres perdidos, ubicados en la sexta posición del bando sureño, a juego y medio de la cima, que posee precisamente su siguiente enemigo, Puebla.
Las “aves parlanchinas” se les han indigestado a los nuestros en las últimas fechas, mejor dicho, a todos los equipos, por algo son la novena más consistente del circuito y por ende marchan como superlíderes, pero en el KKK no ganan una serie desde el 2007. Tienen siete victorias en 18 partidos en la ciudad blanca.
Y los selváticos son junto a Saltillo los terceros mejores locales este 2010, con record de 19-9 jugando en casa para .678 en el coloso de la Morelos… es vital aprovechar esa condición de jugar en casa, aunque los emplumados tienen marca de 16-10 como visitantes, de hecho son líderes en ese tenor por lo que no serán ninguna “perita en dulce”.
Pero aun con eso, los de la melena están “obligados” a quedarse con el compromiso que inicia este miércoles con juego sencillo y el jueves culmina con doble cartelera… ¡No hay de otra señores!
Inmediatamente arribara Oaxaca al parque de la Serpiente Emplumada, en su anterior estadía fueron “barridos” por los peninsulares, serán sin duda otro rival de cuidado, en nueve partidos han triunfado en cinco, pero en los últimos cinco años apenas han obtenido cuatro de 24 encuentros, así que tienen que “pagar” el derecho de piso en suelo yucateco a como dé lugar.
Será una semana clave en las aspiraciones de los de la melena, no tan solo por la imperiosa necesidad de retomar el paso ganador, sino también porque pueden y deben ascender en el standing.
En estos momentos poseen once unidades, las mismas que Tabasco y Campeche, empatados luchando por avanzar y por el porcentaje los Olmecas serian el cuarto invitado, pues Pericos suma 16 puntos, la tribu zapoteca 13.5 igual que Tigres y ya estarían “del otro lado” por sus puntuaciones.
Quedan por disputarse 48 encuentros, un total de 16 series, de las cuales ocho serán en la cueva y las restantes en gira, donde Leones ha “batallado” hasta ahora, con solamente 11 triunfos de 30 cotejos, pero hay plena confianza en los muchachos que ese panorama cambiara pronto, ya no hay margen de error amigos… ¡No hay de otra!
El objetivo es conseguir la mayor puntuación posible, subir peldaños, mínimo al cuarto sitio (garantiza la docena de unidades) para nada permitir que los equipos que quedaron debajo de ellos en la vuelta inicial (Veracruz, Tabasco, Piratas y Mina) los superen y buscar desplazar a los punteros, cada puesto escalado aseguraría la calificación.
Después de medirse a poblanos y oaxaqueños con saldo positivo, inicia la “quincena veracruzana” con visitas al puerto y el reducto petrolero (la vez pasada se jugó para quinientos por aquellos rumbos) buscando traerse ambos compromisos, para después recibir en Mérida a el Águila y Minatitlán inmediatamente (se les gano a ambos la serie 2-1) y sin contemplaciones repetirles la “dosis” para encaramarse en la tabla.
Sobre todo porque enseguida (mediados de junio) llega la tercera visita al centro y sur del país, donde solo se han ganado dos de doce partidos (uno en Puebla y otro en Oaxaca) y para entonces eso ya debe cambiar sacudirse esa “jettatura” y al menos se debe regresar con “tablas”… Vencer o morir… ¡No hay de otra!
De ahí aparecen las series “mochadas” por ese rol realmente increíble, vienen los corsarios, vamos a Cancún y de ahí como dice la canción “Vamos a Tabasco” y recibimos a la garra felina empezando julio, con la idea firme de al menos ganar en casa y cumplir en gira, jugando para el famoso “quinienton”.
En la recta final vuelve el galeón filibustero al KKK y se visita de nuevo la madriguera del tigre, aterriza en la cueva el glorioso Águila y bajamos el telón en la capital del “chapopote”, dos compromisos que también deben terminar en las alforjas de los nuestros.
Si le metemos a Pitágoras al asunto, con la consabida situación de siempre darles la serie a los anfitriones, hablaríamos en obtener 24 triunfos y la misma cantidad de descalabros, lo que repito en la teoría seria “suficiente” para quedar a media tabla y quizás conseguir la meta mínima de los doce puntos.
Se trata pues de ganar y ganar… ¡No hay de otra!
Capitalizar todos los compromisos en casa y vencer fuera al menos la mitad de las giras, la meta tiene que ser la de conseguir 30 victorias, superar el record anterior, tienen la capacidad y el talento para lograrlo, es hora de demostrarlo y con creces…
Ganando las dos en puerta se convierte seguro en la “medicina” para ya resurgir del bache colectivo que los ha perseguido en las fechas más recientes, no hay vuelta de hoja, es el momento de la verdad, de aquí para adelante y ojala se sienta el apoyo de los verdaderos aficionados en el estadio, que igual significaría el mejor de los alicientes y la motivación indispensable para que la manada logre rugir como antes.
Lo han hecho antes, no hay por qué dudar que no lo puedan lograr ahora, tal como se aprecia en la siguiente tabla de los records y tendencias en las cinco campañas previas a la actual, chequen el grafico igual…
¿Quién dice que no se puede?... ¡Animoooooo paaaaiiiissssaaaasssss!
Cualquier comentario, duda o aclaración, estamos a sus órdenes al correo rovirosa65@hotmail.com, con gusto los atenderemos….
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